Leyendo algunas publicaciones de un amigo en las cuales relata de forma muy particular y agradable, anécdotas o pasajes memorables de su vida, respondiome a un comentario : .... "amachate" y lanzate una !!!! , en vista de ello tengo la osadía de hacerlo, no por que sepa o pueda hacerlo minimamente como él, con su habilidad innata (no tengo la mas mínima idea de como , solo decidí contarlo) sino mas bien por el hecho que me resulta simpático compartir esos momentos agradables o no pero que dejan algo en uno.....
Recuerdo una navidad por allá por el 79, esperaba con ilusión de todo niño que dieran las 12 para ver los regalos y luego pasar a la infaltable "reventadera" de "cuetes", recuerdo muy claramente, que un día (un par de meses antes de navidad) caminando por el centro de lima, ví la que vendría a ser la primera camisa que me gustó, era blanca con unas imágenes de unos caballitos (feísima la pobre), en ese momento la mejor camisa del mundo (para mí, claro), le comenté aquel día a mi viejita que me gustaba....; y dieron las 12, comencé a abrir los regalos; muchos y bonitos, algunos importados, por esas fechas el viejo PODÍA darse esos lujos. Abrí varios y conforme iban siendo menos los paquetes, iba perdiendo la ilusión de que llegara a mis manos la bendita camisa. Acabados los regalos, mi viejita (cuando no ellas) sacó una pequeña bolsa de su cuarto y me dijo : falta éste, los ojos se me agrandaron y por supuesto el corazón a 50,000 revoluciones; sentí el paquete, era suave, COMO UNA CAMISA PENSÉ, al abrirlo, como no podía ser de otra manera, LA CAMISA, mi viejita se había acordado de lo que aquel día le comenté y me regaló, no solo una camisa (la primera que me gustó) sino la primera muestra de su preocupación o interes en mí de la que podía de alguna manera estar conciente.
La anécdota o lo importante que no quiero olvidar comentar, es que luego de todo y superado el "shock" inicial del regalo inesperado, del cual ya había perdido la esperanza de recibir, salí corriendo a reventar "cuetes", hasta los "cuetecillos" todo bien, cuando me tocaron los "silbadores" (se deben acordar de ellos); al prender el segundo de ellos, salió para un lado silvando como su nombre indica , de pronto cambió de dirección y fue a parar........ A MI CAMISA !!!!, la novedad y la ilusión no duró mas de 40 min, pero nadie borrará de mi vida el hecho de lo que representa. Saludos
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